Los trabajadores realizarán una medida de fuerza de 24 horas el 13 de agosto, con movilización y asamblea. Podrían marchar a la Quinta de Olivos.

El Hospital Garrahan volverá a detener sus actividades el próximo miércoles 13 de agosto en protesta por el recorte presupuestario del Gobierno nacional y la falta de actualización salarial que, según denuncian, se arrastra desde hace más de un año y medio. La medida, impulsada por la Asociación de Profesionales y Técnicos (APyT), incluirá un paro de 24 horas, una movilización y una asamblea para definir los próximos pasos.

Entre las acciones en debate, se encuentra la posibilidad de realizar una caravana y un “ruidazo” hacia la Quinta Presidencial de Olivos bajo la consigna “Que el presidente escuche al Garrahan”. Los trabajadores también preparan una “gran acción federal” para el 27 de agosto, con el objetivo de visibilizar la situación del hospital, así como la crisis en la salud pública, las universidades y el CONICET.

La secretaria general de APyT, Norma Lezana, sostuvo que los aumentos presupuestarios que menciona el oficialismo no se destinan a salarios, sino a gastos operativos y de funcionamiento logístico. En ese sentido, cuestionó al diputado de La Libertad Avanza, José Luis Espert, por sus declaraciones sobre supuestos incrementos salariales: “Jamás pisó el hospital y no sabe de lo que habla. Sus dichos generan espanto y repulsión”, afirmó.

Lezana advirtió que si el presidente Javier Milei decide vetar la Ley de Emergencia Pediátrica, aprobada recientemente por el Congreso, se producirá “un vendaval de repudio social”. Según la dirigente gremial, el respaldo ciudadano y la convicción de los trabajadores son fundamentales para sostener la defensa del hospital y de la salud pública.