Nicolás Dapena Fernández dejó el cargo horas después de ser oficializado por decreto, alegando incompatibilidades profesionales.

El gobierno nacional protagonizó un insólito episodio este miércoles tras oficializar la designación de Nicolás Dapena Fernández como director ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV). El flamante funcionario presentó su renuncia pocas horas después de la publicación del decreto en el Boletín Oficial.

Dapena Fernández explicó que su decisión se debió a “cuestiones de incompatibilidad en materia de consultoría”, que le impedían asumir la conducción del organismo. La situación generó malestar dentro de la Casa Rosada, donde señalaron que el conflicto debió detectarse antes de la firma del nombramiento.

El Decreto 641/2025 había formalizado la designación con carácter retroactivo al 3 de septiembre. La ANSV, dependiente de la Secretaría de Transporte, es un área estratégica en materia de políticas públicas vinculadas a la seguridad vial y la prevención de accidentes.

En un breve comunicado, el abogado agradeció la confianza pero insistió en que las condiciones profesionales actuales le impedían aceptar el cargo. “Desafortunadamente, por cuestiones de incompatibilidad, no puedo asumir la función de Director Ejecutivo”, señaló.