El presidente rechazó emitir, endeudarse o subir impuestos para mejorar los salarios y ató la recuperación económica a las inversiones y la estabilidad política.

En una entrevista con el periodista Eduardo Feinmann, el presidente Javier Milei descartó tomar medidas de corto plazo para aliviar la situación económica de quienes no llegan a fin de mes. “El remedio sería peor que la enfermedad”, aseguró, al rechazar la emisión monetaria, la toma de deuda o la suba de impuestos.

“¿Quiere que lo imita? Va a tener menos”, respondió Milei al ser consultado sobre cómo poner más plata en el bolsillo de la gente. “Cuando usted genera inflación, distorsiona los precios relativos y cae la actividad económica. No resuelvo esto imprimiendo papelitos”, explicó al hablar sobre la emisión.

Sobre la posibilidad de endeudarse, señaló: “Argentina tiene los mercados de capitales cerrados todavía. Pero además sería profundamente injusto: usted estaría financiando la fiesta de hoy con el trabajo de las generaciones futuras. Es una inmoralidad”. También descartó aumentar impuestos porque “destruiría la inversión y, por ende, los puestos de trabajo y los salarios”.

Consultado sobre cuándo llegará el alivio económico, Milei afirmó que dependerá de la confianza de los mercados. “En la medida que se despeje el riesgo político, va a bajar el riesgo país y eso va a producir una fuerte expansión de la economía con muchas inversiones”, sostuvo.

Como señales de esa supuesta confianza, el presidente mencionó varios proyectos. “De RIGI tenemos aprobados 20.000 millones de dólares y pendientes 60.000 millones más. El otro día se anunciaron los 25.000 millones de dólares de OpenAI. Se anunciaron 30.000 millones de dólares de inversiones de YPF-Eni. Con lo cual está ocurriendo, no es que no está ocurriendo”, remarcó.

Para cerrar, Milei reafirmó que no habrá medidas “populistas” para mejorar el poder adquisitivo a corto plazo: “No hay atajos. Si destruimos las bases de la economía por un alivio transitorio, terminamos peor que al principio”.