La medida fue dispuesta por Juan Pablo Allan, en su carácter de Director Ejecutivo del Registro Nacional de Armas, en el marco de las facultades que le otorga el organismo.

Cerca de 11 mil materiales controlados, entre ellos armas de fuego, serán destruidos mediante procesos de trituración y fundición en el Registro Nacional de Armas (RENAR), a partir de una decisión adoptada por su Director Ejecutivo, Juan Pablo Allan. La medida quedó formalizada a través de la Resolución 52/2025, publicada en el Boletín Oficial.

La norma establece que un total de 10.995 materiales serán sometidos a destrucción conforme a lo previsto por la Ley 25.938, que regula el tratamiento de armas de fuego y otros elementos controlados que hayan sido secuestrados o incautados. El marco legal dispone que, una vez finalizadas las causas judiciales o administrativas, o cuando el estado del trámite lo permita, estos materiales deben ser remitidos al RENAR para su depósito definitivo y posterior eliminación.

Asimismo, la resolución recuerda que, cuando exista una sentencia judicial o resolución administrativa firme que ordene el decomiso, los materiales deben ser destruidos mediante los métodos definidos por el organismo, con intervención de las autoridades de seguridad correspondientes. En ese sentido, se ratificó la aplicación del procedimiento vigente que contempla etapas de trituración y fundición, garantizando criterios de eficacia, eficiencia y cuidado ambiental. No obstante, se exceptuó de este proceso a 383 armas de fuego con pedidos de secuestro vigentes y a otros 1.104 materiales que serán incluidos en futuras instancias de destrucción.